Dicen que perdonar tiene que ver con el olvido, pero yo jamas olvidare lo que me hiciste, lo que vivimos, lo que fuimos y nunca podré dejar de pensar en lo que no logramos ser.
Sin embargo te perdono, por tu inconsciencia, por tu falta de carácter emocional, por que el laboral siempre lo tuviste muy bien desarrollado.
Te perdono por las indecisiones y angustias, por los impulsividad y el orgullo...
Te perdono por que lo que más tuve de ti siempre fue amor.
Ya no importa quien eres, como te llamaste, como te llamabas o que apelativo sentimental respondías; ya solo importa tu presencia en mi memoria y la sensación certera de que exististe y esto que siento es real.
Te perdono por tus miedos, los mismos que yo llegue a tener, los mismos por los que esto llego a su fin.
Te perdono por que me doy cuenta que para perdonarme a mi mismo y lograr dejar a un lado el arrepentimiento tenia que estar en paz contigo...
Ya son muchos meses sin que estés a mi lado. He de confesar que se me hacen un eternidad y siento como si hubieran sido años de distancia y silencio.
Pero ahora la sensación de culpabilidad se hace vana y lejana. No fue solo el que yo decidiera algo, fue mas importante el que tu decidieras dejarme en tu pasado, aun cuando te deje saber que por mucho tiempo siempre serias mi presente.
Tuve que perdonarte para poder seguir adelante, para poder dejar de insistir y entender que el espacio se iba ampliando y no había nada que hacer al respecto. Para poder perdonarme el hecho de haberme dejado consumir por la duda, el miedo y el orgullo de no volverme a dejar pisotear por el tuyo... Orgullo a fin de cuentas el que acabo con todo esto.
Por eso hablo del perdón y no del olvido, desde la conciencia de nuestros actos y errores evalúo y entiendo, comprendo y aprendo, que lo vivido estará siempre presente, que no he de olvidar nada malo, por que eso malo en algún momento fue lo que nos hizo mejores.
Una vez mas me despido, por enésima vez y con un nuevo poema, con el que posiblemente no diga mas de lo que ya he dicho y con el cual posiblemente no acabe de escribir sobre ti.
Seguirás presente en mi vida.
No pretendo olvidarte.
Pretendo y logre perdonarte.
Para que podamos seguir adelante, separados.
Comprendí que el amor no se pierde, se transforma y desde el perdón se convierte en una gran amistad.
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