Por que al no poder hablar, el silencio va mas allá de lo verbal. Se convierte en una sensación de "plenitud" y entendimiento mental.
Por que al no poderte comunicar verbalmente lo que siento, entiendo un poco la trascendencia de un simple "te quiero", en tus ojos llorosos que ya no saben que mas decir.
Desde el silencio encontré mucho ruido en mi corazón, un inagotable desespero mental y una necesidad absurda de "tener" que comunicar....
De expresar todo lo que siento, de no reprimirme, de ser feliz, de ser capaz.
Pero poco a poco el silencio se fue apoderando de mi, me fue dejando indefenso. No tuve mas escapatoria que escucharme a mi mismo, no hubo mas remedio que mirarme en el reflejo y saber que no debía hablar, que tenia que callar mi mente y que esa imagen que estoy viendo sí soy yo.
Que cada sonido cuenta, no solo los de mi exterior. Recordar como respiro, como palpita mi corazón, sentir como trago saliva, escucharme a mi mismo haciéndome el amor.
Cuando ya no hay ruido mental, cuando ya solo queda el silencio y te vuelves a encontrar.... No te encuentras contigo mismo, o al menos no con el mismo que has creído ser....
¡Silencio!
Haz dos minutos de silencio, o tan solo uno, quédate en silencio por tan solo 30 segundos... Sin escuchar nada y estando atento de todo, ignorando tus pensamientos y percibiendo tu interior, reconociendo lo que sucede en el ambiente... hazte a ti mismo ese favor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario